Cita reversa

Quiero cargar el ambiente de tu cuarto, perderme en la infinitud de tu piel, hacerte que sudes y nos quedemos pegados. Nuestras bocas no dejarán de separarse y el aire asfixiado que salga de nosotros será parte del carbón que siga alimentando el fuego que ya estalló. Muérdeme. Déjame que te muerda. Quiero sentirte toda entera junto a mí, saber que te puedo abrazar desde el cuello infernal hasta la cadera sublime. Rompe el silencio mientras mi lengua comprueba el sabor de tu cuerpo. Deja que el aire se rasgue por una pasión incontrolable. Grita, gime. susurra, exhala, mira, cierra los ojos, humedécete los labios...

Quiero cargar el ambiente de tu cuarto, quitarte muy poco a poco la ropa, disfrutarte en capítulos de finales adictivos. Ir descubriendo la suavidad de una piel de una piel de melocotón, los secretos de unos labios pecaminosos, el misterio de tu oreja, la perdición de tu tripa, el desasosiego de tu cadera...

Quiero cargar el ambiente de tu cuarto. Mirarte tras el efecto luminoso de la única vela que nos ilumina. Observarte saborear el palto. Quiero verte sonreir. Quiero oirte. Quiero cenar contigo, para conocerte, poco a poco, desde el principio. Quiero que me invites a cenar y que yo sea tu cocinero. Quiero cargar el ambiente de tu cuarto...