Una habitación de un hotel cualquiera, 34 €. El cuarto de baño está semi-iluminado por una luz bailarina que imprime en las paredes el movimiento de pequeñas velas. Habita un sosiego acompañado por leves sonidos de las microolas que generan dos cuerpos desnudos en la bañera, uno frente al otro. Ambos, sin nada que les cubra física o emocionalmente, se hablan y se acarician con la misma suavidad.
- Sé que algún día me serás infiel, lo sé. Cuando eso ocurra, conocerás a otras mujeres y sin lugar a duda me amarás más que nunca. Tú cambiarás, las piernas donde duermas serán distintas, pero tu corazón siempre me pertenecerá.
- ¿Tengo que engañarte para amarte?
- Tienes que hacerlo para saber cuánto me amas.
- ¿Eso me convierte en una especie de Ulises como en "Son de mar"?
- Tal vez
- Yo creo que te equivocas. Sé que otras mujeres pueden ser maravillosas, pero sólo tú eres quien eres. Sólo tú podrás hacerme sufrir de verdad o llorar de alegría. No necesito dormir abrazado a piernas extrañas para saber eso.
- Puede, pero algún día te lo cuestionarás y entonces yo sabré que me amas con todo tu corazón. Porque no quiero sólo un trocito de él, lo quiero todo entero.
- Dale a más agua caliente y bésame...
Y esa noche, dos almas que nunca llegarían a comprenderse, pero que nunca dejarían de amarse, hicieron el amor como sólo ellos dos sabían.
- Sé que algún día me serás infiel, lo sé. Cuando eso ocurra, conocerás a otras mujeres y sin lugar a duda me amarás más que nunca. Tú cambiarás, las piernas donde duermas serán distintas, pero tu corazón siempre me pertenecerá.
- ¿Tengo que engañarte para amarte?
- Tienes que hacerlo para saber cuánto me amas.
- ¿Eso me convierte en una especie de Ulises como en "Son de mar"?
- Tal vez
- Yo creo que te equivocas. Sé que otras mujeres pueden ser maravillosas, pero sólo tú eres quien eres. Sólo tú podrás hacerme sufrir de verdad o llorar de alegría. No necesito dormir abrazado a piernas extrañas para saber eso.
- Puede, pero algún día te lo cuestionarás y entonces yo sabré que me amas con todo tu corazón. Porque no quiero sólo un trocito de él, lo quiero todo entero.
- Dale a más agua caliente y bésame...
Y esa noche, dos almas que nunca llegarían a comprenderse, pero que nunca dejarían de amarse, hicieron el amor como sólo ellos dos sabían.